Karin McHugh, de 29 años, ha sufrido uno de los peores casos de Gripe A (H1N1) que los médicos hayan visto.
Cuando Karin enfermó estaba embarazada de 38 semanas. Milagrosamente su bebé está bien y ella también ha sobrevivido al virus.
Todo comenzó con una tos el pasado mes de julio. Karin nunca imaginó que tuviera la gripe A, pero llamó a su ginecólogo para saber que podía tomar para la tos. La recomedaron acudir al médico y fue diagnosticada con bronquitis, para lo cual se le entregó un inhalador.
5 días después comenzó a tener fiebre y no podía levantarse de la cama. Sabía que algo andaba mal y le pidió a su marido que la llevara al hospital.
En el hospital le realizaron rayos X y descubrieron que Karin tenía líquido en sus pulmones. Al principio los médicos pensaron que se trataba de una neumonía, pero al no mejorar con un respirador se le hicieron pruebas para saber si se trataba del virus H1N1. Los resultados fueron positivos y a Karin se le realizó una cesárea de emergencia. Tras la cesárea fue inducida a un coma durante 7 semanas. Los médicos dicen que Karin estaba bastante mal, a punto de morir.
Casi 2 meses después Karin pudo conocer a su bebé Liam por primera vez. Si no se le hubiera practicado la cesárea inmediatamente, su hijo no habría sobrevivido, ya que los pulmones de Karin no recibían suficiente oxígeno para ella ni para el bebé. Ambos se encuentran ahora perfectamente.
Se cree que las mujeres embarazadas tienen 7 veces más posibilidades de ser ingresadas en el hospital si sufren la gripe A, y 4 veces más posibilidades de morir debido al virus. Por esta razón se recomienda a todas las mujeres embarazadas que se vacunen contra la gripe A.
