Los masajes para el bebé

Los masajes pueden tener efectos muy beneficiosos en los bebés, siempre y cuando se realicen de manera adecuada.

Está comprobado que el masaje en los bebés mejora su rutina del sueño, los relaja y los calma cuando están inquietos, aumenta su sensación de bienestar y le alivia de molestias como gases. Además, dando un masaje a nuestro bebé le transmitimos nuestro amor y se fortalece el vínculo afectivo.

El masaje en el bebé debe de durar al menos 15 minutos, aunque solo con realizarlo unos pocos minutos también es bueno para el bebé.

A la hora de realizar el masaje a nuestro bebé es necesario estar en un ambiente templado, silencioso y con algo de música relajante de fondo, si quieres. También es necesario el uso de una loción o aceite para bebés, para suavizar el masaje.

Coloca al bebé boca abajo. Frota un poco de loción o aceite en tus manos para distribuirlo bien. Suavemente frota tus manos o las puntas de los dedos hacia adelante y atrás sobre la espalda del bebé durante 1 minuto. Repetir este proceso en diferentes áreas del cuerpo del bebé como la cabeza y la nuca, los hombros, de la cadera a los pies, y de los hombros a las manos.

Con el bebé boca arriba realiza algunos ejercicios como doblar y estirar suavemente sus brazos y piernas. Después mover las dos piernas a la vez, como si estuviera pedaleando, durante varios minutos. Para finalizar el masaje coloca al bebé de nuevo boca abajo y repite los masajes del principio.

Al principio puede ser que tu bebé no reaccione bien al masaje porque no está acostumbrado. Intenta repetirlo todas las noches como una rutina y a tu bebé le encantará.