Cuando tuve mi primera hija, mi marido y yo siempre estuvimos de acuerdo en que pronto le daríamos un hermanito o hermanita para tener a alguien con quien jugar y no fuera hija única. Por lo que, 2 años más tarde, llegó la esperada hermanita para que juntas pudieran jugar, crecer y ser felices.
Cuando la pequeña era aún un bebé no había mucho problema. Los primeros 2 meses fueron una etapa de ajustarse y acostumbrarse a la nueva hermanita, pero aparte de un poco de celos, parece que todo iba bien.
Los problemas comenzaron cuando la mas pequeña cumplió su primer año y ya empezó a tener su personalidad y poco a poco su independencia. Ahora, con 4 y 2 años, se quieren un montón y juegan juntas, pero también todos los días son una continua lucha para que no peleen, lo cual acaba con mi paciencia y me crea bastante estrés.
¿Por qué pelean los hermanos?
Las peleas entre hermanos son algo normal, siempre y cuando no se produzcan de forma muy violenta o constante. Niños bien educados y que suelen portarse bien, también pelean de vez en cuando.
Nosotros los padres debemos enseñarles a compartir y quererse, pero no siempre es fácil.
Existen varios motivos que hacen que los hermanos peleen:
- Celos. Los niños quieren toda la antención de sus padres y no les gusta compartirla con un hermanito/a. Tenemos que intentar no mostrar favoritismos con ninguno de nuestros hijos y demostrarles que les queremos a todos por igual.
- No saben compartir. Los niños pequeños no entienden lo que es compartir y piensan que prestar un juguete significa perderlo. Muchas peleas entre hermanos se producen por un juguete u objeto. Algo que mi marido y yo hacemos es comprarlo todo por partida doble. Sale más caro, pero nos evita muchas peleas.
- Hermanos dominantes. El hermano/a mayor puede a veces ser muy dominante sobre el hermano/a pequeño, dándole órdenes y obligándole a hacer lo que el o ella quiere. No siempre el hermano pequeño está dispuesto a obedecer al mayor, por lo que se producen las peleas.
- Rivalidad. Cuanto más pequeños son los niños, más rivalidad hay entre ellos. También habrá más rivalidad si se llevan entre ellos 3 años o menos de diferencia. Una manera de poder eliminar esta rivalidad entre ellos es evitar las comparaciones y aplaudirles cuando se lleven bien y compartan sus cosas.
- Aburrimiento. Cuando los hijos están aburridos pelean con mucha más facilidad. Intenta hacer actividades con ellos para mantenerlos entretenidos. Mi madre empieza a cantarles canciones a mis hijas cada vez que comienzan a pelearse y la verdad es que funciona muy bien.
¿Qué hacer cuando nuestros hijos pelean?
- Enséñales otras maneras de reaccionar que no sea pelear (irse a otra habitación solo o negociar).
- Siempre habla con ellos cuando se produce una pelea. Es importante que el niño aprenda a expresar sus sentimientos.
- Pon reglas para llevarse bien. Los niños necesitan saber con exactitud lo que no les está permitido hacer, como dar patadas, morder o tirar del pelo a su hermano/a.
- Deja que ellos solucionen sus propias peleas (si no son peleas graves). Si hay un ataque físico, entonces debemos enseñarles que eso no está permitido.
- Si se portan demasiado mal se les puede castigar un rato en un rincón, contra la pared o sentado en una silla por unos minutos.
Si el niño se porta demasiado mal o se vuelve muy agresivo, habrá que consultar con un especialista.