Provocar o inducir un parto significa comenzar de manera artificial las contracciones mediante técnicas o medicamentos en el hospital.
Un parto se provoca cuando no comienzan las contracciones de manera natural, o cuado después de haber comenzado se paran y no hay un progreso.
Otras causas por las que se induce el parto son:
- Se rompe la bolsa de agua pero no comienzan las contracciones.
- En caso de que la madre sufra preeclampsia.
- Si hay insuficiente líquido amniótico.
- Cuando se presenta placenta envejecida.
- En casos de que la madre sufra alguna enfermedad crónica como diabetes.
- Si han pasado 1 ó 2 semanas desde que saliste de cuentas.
- Cuando existe una infección en el útero de la madre.
- Si hay meconio en el líquido amniótico.
- El feto presenta problemas de crecimiento.
- Antecedentes de un parto donde el bebé nació muerto.
Técnicas y maneras de provocar el parto:
- Rotura del saco amniótico si ya existe una dilatacción del cuello uterino.
- Administración de la hormona prostaglandina cuando el cérvix no está dilatado. Se administran por la vagina para estimular las contracciones.
- Administrar la hormona sintética ocitocina de manera intravenosa. Es posible regular la cantidad que se administra según avanza el parto.
- Separar la membrana de la pared del útero. Lo realiza el médico introduciendo un dedo en la vagina.