Según estudios realizados en Canadá y EEUU, se ha comprobado que los biberones de policarbonato (un tipo de plástico), contienen una sustancia tóxica denominada “bisfenol A”. Esta sustancia tiene un efecto similar a las hormonas femeninas, y puede contaminar la leche que se encuentra en el biberón.
El bisfenol A se desprende del biberón al ser calentado, ya sea durante el proceso de esterilización, al lavarlos en el lavaplatos o al meterlos en un microondas.
La mayoría de los biberones de plástico contienen esta sustancia tóxica, por lo que en países como Canadá, se prohibirá la venta de biberones con este tipo de plástico a partir del año 2009.
La sustancia tóxica bisfenol-A puede producir daños en bebés y niños, ya que sus organismos son más vulnerables al agente químico. Daño cerebral, problemas en la conducta y una pubertad precoz, son algunos de los daños que puede ocasionar esta sustancia.
Cuando vayas a comprar un biberón, es importante mirar su composición para comprobar que no contiene policarbonato (PC) y PVC.